
AUTORA: ELÍSABET BENAVENT
PÁGINAS: 528
Sofía tiene tres amores: su gata Holly, los libros y El café de Alejandría.
Sofía trabaja allí como camarera y es feliz.
Sofía no tiene pareja y tampoco la busca, aunque desearía encontrar la magia.
Sofía experimenta un chispazo cuando él cruza por primera vez la puerta.
Él aparece por casualidad guiado por el aroma de las partículas de café... o tal vez por el destino...
Él se llama Héctor y está a punto de descubrir dónde reside la magia.
Hoy vamos a por otro de los libros de Elísabet Benavent, otra historia maravillosa que ha conseguido atraparme con su magia.
La magia de ser Sofía nos cuenta la historia de Héctor y Sofía. Dos personas a las que el destino y más en particular, el Alejandría, se encarga de juntar.
Sofía es una chica alegre, simpática y cariñosa que trabaja de camarera en un bar llamado El café de Alejandría. Aunque la vida (en especial su madre) no la ha tratado bien y su última relación amorosa ha sido algo traumática sigue adelante en su día a día con una sonrisa en la cara y siempre buscando el lado positivo. Claro, que ella quiera ser feliz no significa que lo consiga siempre.
Me ha super, hiper, mega encantado que este personaje no sea la típica chica delgada con un cuerpazo de infarto que aunque se ponga un saco de patatas le queda estupendamente. Sofía no es una chica ni delgada ni gorda, pero si una persona que viste una talla 44 con unos kilos de más que le sientan de maravilla. Por supuesto ella no esta conforme con su cuerpo, pero ¿quien lo está al 100%?

Oliver es el mejor amigo desde la infancia de Sofía, el típico chico guapo y abusón que se convirtió en su protector y a la que todavía sigue protegiendo. Un amigo incondicional, de esos que te dicen las cosas claras te guste o no. Un picaflor que con casi 30 años todavía vive la vida como si tuviera 18 y no se cansase nunca de salir de la cama de una chica distinta cada día.
Oliver también tiene una historia que contarnos y que iremos descubriendo poco a poco.
Otros personajes de los que no me puedo olvidar son: Abel, el compañero de trabajo de Sofía, un amigo que sabe hacerte reír incluso en los peores momentos. Me ha caigo genial y la verdad es que me he reído muchísimo con el y con sus locas ocurrencias.
Mamen, la madrastra de Sofía. Pero no os penséis que es la típica mujer mala y despiadada de los cuentos, no, Mamen a parte de ser su madrastra es su mejor amiga, raro ¿verdad?.
Mamen es la madre amiga, buena y cariñosa que nunca tuvo ya que su madre biológica no es que sea una madre ejemplar. Por lo menos a mí cada vez que aparece en esena me saca de mis casillas, aunque claro, una madre es una madre y eso no se olvida.
También conoceremos a Estela, la amiga y compañera de piso de Héctor, una chica extrovertida y tremendamente loca :-). A Lolo, el jefe y dueño de el Alejandría y a Lucia, la tercera en discordia, pero es imposible hablaros de todos los personajes porque si no, no acabaría nunca.
El libro está narrado en primera persona por Sofía y alguno capítulos por Héctor. De modo que en todo momento sabemos lo que piensan y sienten nuestros protagonistas.
Admito que en los primeros capítulos andaba un poco pérdida con tanto cambio de historia, pero en el capítulo 4 o 5 todo se centra (en realidad la que se centro y se aclaró fui yo) y empecé a cogerle tanto cariño que no podía parar de leer. Aunque hay algunas cosas que no me han gustado en la forma de actuar de Héctor, me ha encantado la historia tan bonita y tan llena de magia que crean estos personajes. Hay ciertas cosas que me enfadan pero a pesar de no gustarme demasiado, comprendía lo que hacían y entendía sus motivos.
Admito que en los primeros capítulos andaba un poco pérdida con tanto cambio de historia, pero en el capítulo 4 o 5 todo se centra (en realidad la que se centro y se aclaró fui yo) y empecé a cogerle tanto cariño que no podía parar de leer. Aunque hay algunas cosas que no me han gustado en la forma de actuar de Héctor, me ha encantado la historia tan bonita y tan llena de magia que crean estos personajes. Hay ciertas cosas que me enfadan pero a pesar de no gustarme demasiado, comprendía lo que hacían y entendía sus motivos.

En definitiva, La magia de ser Sofía es un libro del que he disfrutado mucho, lleno de emociones y sorpresas inesperadas, muy adictivo y con una historia de amor un poco rara pero llena de momento tan mágicos como nuestro protagonistas.